Olivia y su primer contacto con los tampones y la copa menstrual
Acompañando la sexualidad de nuestros niños con Olivia.
Os presento a Olivia.
Vamos a recorrer con Olivia la sexualidad en su diferentes momentos y en sus diferentes fases.
Olivia son relatos que nos ayudan a hablar de SEXUALIDAD con nuestros niños
Olivia lleva unos meses con la menstruación,
meses muy irregulares...
así suelen ser los primeros meses y años de regla...Hasta ahora ha estado usando compresas,
compresas de tela y compresas desechables...
En esta ocasión, al ver a su mamá usando la copa menstrual,
quiere probar la copa o el tampón...
PERO al verlas....
¡¡Mamáaaaaaa!! ¿¿Cómo me pongo este tampón o esta copa?? ¿Cómo me van a entrar en este mini agujero??
"Vamos poco a poco, cariño.
Es normal que tengas esa impresión...
A mí me pasó igual...
Sentí miedo la primera vez que me puse un tampón,
lo hice a ciegas,
sin mirar,
sin conocer mi vulva y sus agujeritos...
Coge el espejo y vamos a volver a observar la vulva.
Esta vez no solo la vas a observar,
sino que con tu dedito vas a ir tocando cada una de las partes que te voy a ir nombrando.
Antes de introducir algo externo dentro de tu vagina,
es importante conocerla en profundidad y sentirte cómoda con ella
y ¡qué mejor que con tu propio dedito!
¿te parece?
Empezamos con los labios externos.
Ábrelos un poco y toca tus labios internos.
En tu caso, si te fijas, tus labios internos son asimétricos,
tienes un lado más grande que el otro,
es importante que conozcas esas variaciones,
son normales...
Hay tantas normalidades como vulvas hay,
pero si no lo sabes,
si no lo conoces,
te puedes asustar...
Te acuerdas que en la zona de unión entre ambos labios internos, se encuentra nuestro órgano de las cosquillitas, el clítoris,
está tapado por un capuchón.
Al tocar esta zona, notarás mucha sensibilidad...
Abre un poco el capuchón.
Lo que aparece es el glande del clítoris,
la única parte visible del clítoris
pero recuerda que el clítoris es mucho más que esta zona....
Y entre los labios internos.
se encuentran el agujero del pis y más abajo la entrada de la vagina.
Esos restos de telita alrededor de la vagina se llaman himen.
Si quieres, si puedes,
con tu dedito,
con mucha suavidad,
con mucha tranquilidad,
roza tu entrada vaginal.
No hay prisa.
Si te pones muy nerviosa, es mejor dejarlo para otro día.
La vagina es un conducto elástico que conecta la vulva con el cuello del útero.
Por dentro sus paredes están pegadas entre sí
y se separan al introducir el tampón o la copa.
La vagina es un músculo y cuando siente tus nervios, se contrae y puede doler.
Lo mismo ocurrirá cuando quieras introducir el tampón o la copa vaginal.
Es mejor esperar, pasar a otra cosa
y en otro momento volver a investigar y a conocer nuestro cuerpo.
¿Qué te parece?
¿Cómo lo sientes?
Ahora que conoces un poco más tu vagina
¿quieres intentar probar el tampón? ¿o la copa?
¿o prefieres esperar?"
La vulva y la vagina... dos grandes desconocidos.
Los niños con pene lo tienen algo más fácil ya que sus genitales son muy visibles.
En cambio, las niñas necesitan de un espejo para poder ver todo.
Este relato y esta experiencia vivida con Olivia permite no solo VER
sino también TOCAR, SENTIR esa parte del cuerpo tabú.
Permite NOMBRAR, hacer explícito y permite PERDER EL MIEDO.
Todo lo desconocido produce miedo, asco, vergüenza...
Este relato permite conocer nuestra anatomía ÚNICA,
conocer lo que es "normal" para cada una de nosotras.
Hay tantas "normalidades" como vulvas hay.
¡Qué mejor que conocer la suya propia con sus variaciones normales!
Y así no asustarse cuando no se parece al de la foto o al de la película...
Conocer y nombrar la variedad, las diferencias, siempre relaja.
Ser diferente es lo normal,
cada cuerpo es único.
Nuestras niñas al conocerse más,
al conocer mejor su cuerpo con sus individualidades,
sabrán reconocerse mejor en la diferencia,
sabrán reconocer mejor cuándo hay algo que no está bien,
cuándo hay algo por lo que sí deben preocuparse o ir al médico.
Este relato también nos permite hablar de un concepto muy interesante:
el himen y la virginidad.
Ser virgen es un constructo cultural,
no es un constructo fisiológico ni médico.
El himen es esa telita que protege la entrada de la vagina.
Hay niñas que en las revisiones de los primeros meses de vida solo quedan restos,
hay niñas a las que se les rompe tras una caída,
al subir en bicicleta...
El himen debe estar ya perforado para permitir la salida del flujo menstrual.
El himen no se "rompe" la primera vez que se tienen relaciones sexuales.
¿Cómo es la relación de nuestra niña con su vulva y su vagina
y con los productos de higiene femenina?
¿Cómo la quieres acompañar?
Me encantará leerte en comentarios...
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