La pubertad ha llamado a la puerta (II)....

¿Cómo acompañar a nuestras niñas y niños ante la primera regla o la primera eyaculación?

LA PRIMERA REGLA. LA PRIMERA EYACULACIÓN.
Entre los 9 y 16 años nuestras niñas tendrán su primera menstruación, también llamada MENARQUIA. En el post anterior expliqué las señales que avisan de la próxima aparición de la menarquia (Link POST)
Entre los 10 y 15 años nuestros niños tendrán su primera eyaculación, la ESPERMAQUIA.

La primera regla y la primera eyaculación suponen para nuestras niñas y niños el paso de su etapa de INFANCIA, NIÑEZ a una nueva etapa: la etapa FÉRTIL. 

Este cambio de etapa implica varias consecuencias: 

1. Aparece el deseo sexual

Empiezan (si no lo tenían ya) a tener curiosidad por todo lo que rodea la palabra SEXO, SEXUALIDAD y PLACER....
Aparece el interés por su cuerpo, por experimentar con su cuerpo y por la masturbación... Aparece el deseo sexual...

Si esta necesidad de curiosidad y de información no recibe respuesta en casa porque nos da miedo, porque nos da vergüenza..., la buscarán fuera: a través de amigos, en las redes sociales, en la pornografía... Por este motivo es importante, desde pequeños, acompañarles en la gestión y en el conocimiento de su cuerpo y de su sexualidad. Y no sólo debemos acompañarles en la parte biológica y en la parte de riesgos (que también por supuesto) para evitar embarazos e infecciones de transmisión sexual (conocer qué prácticas sexuales pueden dar lugar a embarazo y a infecciones y cuáles no), sino también en la parte de la sexualidad como PLACER, como algo bello, como autoconocimiento, como algo digno de autocuidado y autorespeto. 
Dar una visión más amplia de la sexualidad. Sembrar semillas de amor propio. La sexualidad no es sólo darse al otro... En ese dar al otro, uno se pierde a sí mismo. En la sexualidad, lo primero es uno mismo. Es por ello que deben conocerse, deben conocer y amar su propio cuerpo, conocer qué cosas y qué zonas les producen placer y cuáles no y respetarse y pedir respeto. Saber pedir y saber decir NO. 

Desde pequeños nuestros niños y niñas están en contacto estrecho con su cuerpo, sus sensaciones y con el placer: esas cosquillitas, esos abrazos, esos besos, esas palabras amorosas, esas miradas....  
Muchos niños inician la masturbación desde muy pequeños. A esa edad no tiene connotación sexual. Simplemente les produce placer. El cómo reaccionemos ante estas situaciones tiene su importancia. No juzgarlo, normalizarlo y poder hablar de ello con naturalidad, contándoles que ese placer es natural, que procede del clítoris o del pene, y que pertenece a su área de INTIMIDAD.

• Se puede aprovechar ese momento para hablar de lo que significa intimidad y del hecho de que su cuerpo es SUYO. Y hablar del consentimiento: saber sentirse, saber escucharse y saber cuándo decir SÍ y cuándo decir NO. 

• Se puede aprovechar ese momento para nombrar la vulva y todas sus partes (uretra, vagina, clítoris, labios mayores y menores), para nombrar el pene y todas sus partes (testículos, escroto, cuerpos cavernosos), para coger un espejo e identificar y palpar todas esas partes.

No es animar. Es ayudarlos a conseguir el poder sobre su propia sexualidad. De esta forma, no les darán ese poder a ese otro que aparezca por su vida, ni a la pornografía, ni a las redes sociales... 
La educación sexual fomenta además la responsabilidad y abre un canal de comunicación padres-hijos muy bello y necesario (sabrán a quién acudir si tienen algún problema).


 2. Se convierten en fértiles

• Nuestra niña pasa a ser fértil. Ya puede tener hijos y convertirse en mamá. Por inmadurez, los primeros meses, incluso años, los ciclos de nuestras niñas pueden y suelen ser anovulatorios (no se produce ovulación) pero igualmente hay sangrado, incluso sangrado muy intenso. La ovulacion es el evento principal del ciclo. Tras la ovulación el organismo se prepara siempre para albergar un embrión, haya o no fecundación. Nuestras niñas deben saber que la ovulación puede tener 3 resultados: una MENSTRUACIÓN, un EMBARAZO o un ABORTO (los abortos espontáneos son muy frecuentes por lo que es necesario dar visibilidad, dar un nombre y un espacio a esta tercera posibilidad. Lo que no se nombra, no existe y ésto puede crear un gran vacío lleno de sufrimiento y soledad). Es importante acompañar a nuestras niñas en este conocimiento de su cuerpo y de su fertilidad, explicar qué prácticas sexuales pueden dar lugar a embarazo y cuáles no. La fertilidad femenina es cíclica: los días fértiles abarcan los 5 días antes de la ovulación (porque ese el tiempo que sobrevive un esperma) y un día después de la ovulación (porque ese es el tiempo que sobrevive el óvulo). 

• En los varones, puede ser que no esté completado el desarrollo testicular en el momento de las primeras eyaculaciones y por lo tanto, el semen contenga escasa cantidad de espermatozoides. No se puede establecer con exactitud el momento en que un varón puede llegar a ser padre. Es necesario que desde el primer momento entiendan el significado de estos fluidos sexuales: el SEMEN y el LÍQUIDO PRESEMINAL. Ambos fluidos pueden dar lugar a embarazo y a infecciones de transmisión sexual. Recordadles la famosa frase: "Antes de llover, chispea". A diferencia de las niñas, la fertilidad de los varones es constante: a partir de la pubertad producen espermatozoides hasta el final de su vida. Acompañar a nuestros niños en este conocimiento les ayuda a entender qué les ocurre y conocer las consecuencias de sus actos y decisiones. 

 3.  Un tsunami hormonal. Inicio del ciclo menstrual. 

• Los varones viven un tsunami hormonal característico de la adolescencia pero no viven cambios cíclicos hormonales. Su patrón hormonal es más o menos lineal

• En cambio las niñas empiezan a ser cíclicas y lo serán hasta la menopausia. ¡¡Aproximadamente 40 años!! Pasan de ser lineales, con un patrón hormonal similar día tras día, a tener una mezcla hormonal diferente según el momento del mes. Necesitan conocer qué significa SER CÍCLICAS, qué implicaciones conlleva y necesitan CONOCERSE en las diferentes fases del ciclo para así vivir a favor del ciclo y no en contra. Los cambios hormonales a lo largo del ciclo nos hacen ver el mundo e interaccionar con el mundo de formas distintas. No tenemos la misma energía, el mismo rendimiento académico ni atlético, ni las mismas ganas de socializar ni las mismas necesidades en la fase ovulatoria que en la fase premenstrual. Nuestro cuerpo, nuestro cerebro, nuestras hormonas son distintas... Pretender estar siempre igual es luchar contra la naturaleza del cuerpo humano.
  Tener este conocimiento, aprender a vivir con ese ritmo interior cambiante nos empodera, nos devuelve las riendas de nuestras decisiones y conductas.

De forma inconsciente, educamos en el ciclo menstrual desde que nuestros niños y niñas son muy pequeños. Según como nosotras vivamos nuestro ciclo, eso es lo que les transmitimos. Si es un tema tabú del que no se habla, si escondemos las compresas o nuestra sangre para que no lo vean, si vivimos con enfado nuestros cambios de humor.... así es como ellas aprenden a vivirse en su ciclo menstrual. Tanto las niñas como los niños, que aunque no tienen este ciclo menstrual, compartirán muchas vivencias, muchos día a día con mujeres menstruantes. 

CELEBRAR LA LLEGADA DE LA MENARQUIA Y DE LA ESPERMAQUIA
Recuerdo perfectamente mi menarquia. Un día, al ir a hacer pis, manché el papel higiénico de "algo marrón". Corriendo avisé a mi madre, quien corroboró mis sospechas. La supliqué que no le dijera nada a mi padre. ¡¡¡Qué vergüenza!!! (Entiendo que decírselo a mi padre fue lo primero que hizo...). 
Me encerré en mi habitación y lloré. No sé muy bien porqué.... pero lloré.... 
El resto del día pasó como un día cualquiera más....

Para evitar que la vergüenza, el secretismo, el miedo, incluso el asco.... sean emociones que acompañen la menarquia/espermaquia de nuestros niños y niñas, es necesario que la sexualidad sea vivida con naturalidad en la familia desde que son muy pequeños. 

Y con esa misma naturalidad....

¿Por qué no compartir y celebrar ese día junto con nuestros niños? 

¿Por qué no convertir ese día en un día ESPECIAL? 

Y es que se trata de UN DÍA ESPECIAL. 

No se trata de un día cualquiera.

Se producen cambios en el cuerpo y dar valor a esos cambios tiene su importancia. 

Puede ser un día o un plan de chicas/de chicos, o algo más en familia...
Puede ser ver algún documental o película relacionado o no con el tema. 
Puede ser hacer una foto especial, comer algo distinto...
Puede ser hacer un ritual, encender una vela, sembrar una planta...

Puede ser cualquier cosa.... 
Cualquier cosa que convierta ese día en UN DÍA ESPECIAL.
Cualquier cosa que haga que nuestra niña, que nuestro niño, se sienta especial, se sienta sentido, se sienta visto...
Cualquier cosa que permita dar un lugar, un espacio, un significado a eso que sucede...
Culaquier cosa que le ayude a integrar esos cambios..... a decir ADIÓS a la etapa de la niñez... y a decir HOLA a esta nueva etapa que está por empezar... con todas sus implicaciones y responsabilidades...

Continuará...