La lucha con la alimentación

De pequeños, porque no comen...

no comen lo que los adultos consideramos suficiente,

les obligamos a comer,

se tienen que acabar el plato...

.... aunque ya no tengan hambre,

... aunque no les guste lo que hay.

¡Hay que comerlo TODO!

... y poco a poco, 

se desconectan de su cuerpo, 

de sus sensaciones de hambre y saciedad...


En la niñez, porque comen de más...

comen con ansiedad,

comen mucho, 

pican a todas horas,

engordan

e iniciamos las restricciones

cosas que SÍ pueden comer,

cosas que etiquetamos como "saludables"

cosas que NO pueden comer,

cosas que etiquetamos como "no saludables"...

...y se vuelven a desconectar de su cuerpo, 

de sus sensaciones y necesidades reales...

o quizás ya lo estaban y por eso comían de más... 

¿quién sabe?

 

Y llega la adolescencia

ese periodo tan complejo

en que la imagen corporal adquiere una gran importancia,

en que los comentarios externos tienen un gran impacto en el adentro,

y al vivir rodeados de tanto "postureo" y filtros en las distintas redes sociales, 

de tantas imágenes de cuerpos ideales (muchos no reales) en la tele, revistas y redes sociales

se producen comparaciones, 

se crean complejos

...y nuestros adolescentes se inician en el mundo de las dietas 

y de los trastornos de alimentación...


Toda una historia de lucha con la alimentación desde que nuestros niños son pequeños,

creándose esta separación con el cuerpo y con sus necesidades reales , 

creándose esta dificultad de asociar comida y PLACER... 

 

¿Y si cambiamos nuestra forma de acompañar la alimentación de nuestros niños? 

¿y si cambiamos nuestra mirada?

¿y si introducimos desde que son pequeños esa escucha y respeto al cuerpo

esa escucha a las sensaciones de hambre,

esa escucha a la sensación de saciedad, 

esa escucha a:

"¿qué te pide el cuerpo ahora?

¿qué necesita tu cuerpo ahora?"

esa escucha atenta a nuestro SABIO ENTÉRICO* interno

 

Sería un regalo para nuestros niños 

acompañarles y ayudarles a mantener esa conexión con su sabio interno,

esa conexión tan innata, 

con la que nacen 

y que les hace llorar cada vez que quieren teta o bibe... 

 

Mantener viva, 

desde que son pequeños, 

esa conexión con la sensación de HAMBRE, de PLACER, de SACIEDAD,

con las señales y necesidades del cuerpo...

 

Cuando permanecemos conectados con nuestro sabio, 

el equilibrio al que llega nuestro cuerpo es maravilloso, 

parece magia... 

pero es sabiduría innata...


¡DEMOS VOZ A SU TUBO DIGESTIVO 

Y A SU SABIO INTERNO!

 

 

y tú... 

¿Qué relación tienes con la comida?

¿Te animas a acompañar la relación de tu niño, niña con la alimentación desde este otro lugar de escucha interna?

Cuéntame,

Te leo.... 

 

*El concepto SABIO ENTÉRICO tiene su inspiración en Adriana Ordóñez, creadora de Vivencia EcoSomática, y en su bellísimo proceso SABIDURÍA ENTÉRICA

Comentarios

  1. Hola Inés.
    Que difícil escuchar ese sabio interno cuando nos tenemos que mover y adaptar a un horario
    Desde que nacemos, dar el pecho o biberón cada tres horas, ni antes ni después. Crecemos y al colegio, desayuno a las 8 ( tengas hambre o no) y por fuerza tienes que tomar algo porque ya no hay nada hasta las 12 que es el recreo. Comemos a las 2 , merienda de 5 a 6 y cena sobre las 8 o 9. Y entre esas horas no puedes comer nada porque nos quitaría el hambre.
    Seguimos creciendo y al trabajo. El desayuno se adelanta a las 6 de la mañana. Nos dejan tomar un tentempié sobre las 10 y los demás horarios se mantienen más o menos, hora arriba hora abajo. Horario universal.
    ¿Y qué comemos? Lo que nos pide el cuerpo. Y no nos pide lo que necesita, fruta, verdura, frutos secos, carne, pescado. Nos pide lo que ve en los anuncios, nos pide todo eso con lo que nos bombardean continuamente y nos dicen que nos hará sentir mejor. Todo ultraprocesado, lleno de azúcares y estimulantes. Y como engordamos nos ofrecen dietas y batidos milagro para adelgazar y tener un cuerpo perfecto ( perfecto según la industria). Porque para entonces ya estamos atrapados y el cuerpo se convierte en un producto mas del mercado.
    ¡ Que gran batalla esta de la alimentación! ¡ Que tema tan interesante!
    En casa comemos cada uno a una hora. Yo mientras hago la comida sobre las 12. El peque cuando sale del cole a la una o a las dos. El padre cuando sale de trabajar sobre las cuatro o cinco. A veces uno merienda y otro no, y la cena solo el peque. Un auténtico caos ( para los demás) nosotros comemos cuando tenemos hambre ( a demanda). El autentico reto es comer saludable, no dar al cuerpo lo que pide, sino, lo que necesita. Porque no lo sabemos, nadie nos ha explicado cómo funciona el cuerpo en el que habitamos.
    Intento enseñar a mi hijo lo que necesita el cuerpo. Le hablo de vitaminas necesarias, de proteínas vegetales o animales, le hablo de lo perjudicial de los aditivos a largo plazo. Comemos casi de todo, saludable y menos saludable. Fruta, verdura y legumbre casi a diario, y hamburguesas o pizzas comerciales una vez a la semana o cada quince días ( si salimos a comer fuera )
    ¡ Que gran responsabilidad y que poca información hay sobre el tema, porque no interesa!
    Gracias Inés.
    Un fuerte abrazo,
    ....

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    Respuestas
    1. ¡Qué interesante todo lo que compartes! el tema de horarios, de seguir un ritmo impuesto....
      ¡Gracias!
      Es un tema muy interesante al que debemos llevar atención desde que nuestros niños son pequeños, evitando categorizar los alimentos en "buenos" o "malos". Ningún alimento es en sí "bueno" o "malo", dependerá más de las veces que lo tomemos, del resto de alimentos que tomemos.... y también importante favorecer esa conexión con el cuerpo y sus necesidades, repetando las sensaciones de hambre y saciedad.
      Gracias por comentar!!!
      Un abrazo,
      Inés

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