Revisión bebé de 4 meses. MAMA PORTAAVIONES 
¿Y qué tendrán que ver los portaaviones en una consulta de pediatría?


Con el permiso de la mamá, comparto un momento de la consulta.

  • Niña, 4 meses. Sonriente, activa, vital.
  • Mamá, agotada, sonriente, exhausta... "en muchas ocasiones no puedo más, me desquicia. Si se la dejo a mi madre o la dejo en el salón con algún estímulo, me busca, me sigue con la mirada, y llora. NO me deja ni un instante, ¡ni para ducharme! Sólo quiere conmigo. Se está acostumbrando a mí."

"¡Enhorabuena! ¡¡Eres mamá portaaviones!!
Tu hija no es caprichosa. 
Tu hija no es una tirana.
 Tu hija te siente como su pilar de seguridad y su pilar de supervivencia. 
Estás creando un apego seguro. 
Cada vez que tu bebé te reclame, con tu voz interior quiero que te felicites. 
Eso no quita que necesites también tiempo para ti, tiempo para recargarte tú también. Una cosa no excluye la otra. Todo lo contrario. NO podrás ser un buen portaaviones y dar, si no te llenas tú primero."


Escuché esta metáfora hace un tiempo (LINK) y me pareció una imagen muy aclaratoria de la idea de vínculo y apego seguro.

El bebé es el avión.
La mamá/el papá es el portavión, el lugar de descanso, de seguridad, de llenado de combustible del bebé. Necesita al portavión. Depende de él para sobrevivir.



Tras el descanso y el llenado de combustible, el avión puede despegar y separarse del portavión, puede ir a investigar el mundo que existe más allá del portavión.
Al principio, se separará muy poco, no llegará muy lejos, siempre manteniendo el portavión a la vista.

En el momento, en que el portavión se aleje o no se encuentre disponible por algún motivo (mamá al teléfono, mamá en la ducha), o que el avión se sienta inseguro, éste volverá en busca de su base de seguridad, volverá a aterrizar para llenarse de confianza.

Es una reacción automática, instintiva, es una reacción guiada por su cerebro primitivo y emocional. No lo hace para fastidiar. Su sistema de apego siente peligro y se activa.
Si en esos momentos les respondemos de manera empática, cercana, con comprensión de lo que está necesitando, con una palabra o una mirada cariñosa, ésto rellenará de nuevo su depósito y podrá volver a salir a explorar




Poco a poco, con el tiempo y la seguridad de esta base confiable que responde a sus necesidades, el avión se alejará cada vez más y volverá cada cierto tiempo para recargar ese combustible.

Y, también poco a poco, irá conociendo y confiando en otros portaaviones, siempre que éstos sean confiables y respondan a sus necesidades: los portaviones abuelos, los portaviones profesores..


Creo que conocernos, conocer por qué reaccionamos como reaccionamos y por qué nuestros niños reaccionan como lo hacen, nos ayuda a entender, a poner nombre y a ajustar nuestras expectativas y las atribuciones que hacemos a las conductas de nuestros niños. 




Comentarios

Entradas populares